Esta coqueta casa representa la típica casita de aldea rodeada de tranquilidad y que nos sumerge a tiempos de antaño con un ambiente costero e ideal para disfrutar de unas relajadas vacaciones conociendo la Costa da Morte y disfrutando de sus paisajes, playas y gastrónomía sin renunciar a la comodidad de un alojamiento privado agradable.
La casa cuenta con dos dormitorios dobles, uno de ellos con cama de matrimonio y otro con dos camas gemelas, además de una cocina-comedor completamente equipada. Cuenta además con garaje propio, un pequeño jardín y barbacoa. La calefacción es ecológica con estufa de pellets que ofrece un ambiente cálido y agradable. Para adaptarla a tiempos modernos, se puede disfrutar de wifi gratuito e incluso Netflix.
Su estratégica ubicación es ideal para visitar toda la Costa da Morte, A Coruña (70km) y Santiago de Compostela (65km).