Estuvimos 5 noches alojados en el piso. Es una vivienda amplia, con una terraza y vistas al Duero espectaculares, y, aunque está alejada del centro en coche se llega en 10 minutos. Se tiene rápido acceso a las autopistas al norte y al sur de Porto. Otro punto positivo es el parking: todos los días pudimos aparcar en la puerta del edificio. Llegamos un viernes por la noche, y de antemano, Filipa ya nos había facilitado recomendaciones de restaurantes, lo cual ha facilitado llegar, dejar las maletas y salir a cenar. Ahora bien, cuando llegamos se nos informó que había un problema con la pila de la cocina que perdía agua (en efecto perdía mucha agua por abajo y dejaba toda la cocina mojada), y que la lavadora no funcionaba pues tenía la puerta fuera. Según nos dijeron, se acaban de dar cuenta de ello y que lo arreglarían el sábado. Parece que fueron el sábado a arreglarlo y no pudieron, por lo que estuvimos en esa situación hasta el lunes a media mañana que volvieron para solucionarlo. Fue incómodo durante esos días utilizar la cocina. La lavadora definitivamente tampoco la arreglaron el lunes, pero para nosotros ello no fue importante pues no la íbamos a utilizar. Tampoco funcionaba la cafetera de cápsulas y en general creemos que al piso le falta un poco de mantenimiento. Es muy bonita, pero tiene sus años y requiere . En cuanto a la limpieza, le faltaba bastante. Tampoco había productos de limpieza para acondicionarla (estaban los botes vacíos). Por último, quizás lo más grave, es que el último día debíamos dejar la casa a las 5 de la mañana para coger un vuelo temprano, y nos dijeron que dejáramos las llaves dentro de la casa, pero nadie nos avisó que la puerta de calle del edificio podría estar cerrada con llave y casi quedamos atrapados sin poder salir del edificio y sin poder entrar a la vivienda, lo cual nos hubiese llevado a perder el vuelo. Como eramos varios, unos bajamos las maletas y llegamos a darnos cuenta que estaba la puerta de calle cerrada cuando, de casualidad, otros aún no había cerrado la puerta del piso con las llaves dentro. De verdad fue un momento de mucho stress cuándo creimos que nos podríamos salir del edificio y perder nuestros vuelos. Tenerlo muy en cuenta. En definitiva bien, la vivienda cómoda y bonito, pero con situaciones que no habíamos pasado en otras viviendas que hemos alquilado en el pasado.