Es una casa amplia, abierta, muy bien equipada y con ubicación insuperable, las vistas y la terraza dan sensación de vivir en un barco. Andando en la playa a pocos minutos se puede alquilar de todo para salir al agua y hay chiringuito
La zona es muy bonita, tranquila, familiar y a pie de restaurantes, supermercados y servicios. Celia es una persona encantadora, resolutiva y muy amable. Fuimos dos familias con 6 niños y lo pasamos todos muy bien. Lo peor fue la pena de tener que marcharnos. Repetiremos