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María José P.
8 de septiembre de 2017
Surrealista: no pudimos entrar en el apartamento la primera noche.
Hemos viajado cuatro amigos. Nos recibió un empleado de la agencia BNBLORD, nos entregó un juego de llaves y tomó nota de que el lavavajillas no funcionaba y expulsaba agua. Se comprometieron a arreglarlo al día siguiente pero solo lo desenchufaron, con lo cual, no lo pudimos utilizar y estuvo toda la semana expulsando agua.
Pero lo peor vendría la primera noche. Al intentar acceder al portal de la casa, a las 12 de la noche, no pudimos, había otra cerradura de la que no nos dieron llave. Llamamos a los teléfonos de la agencia y no nos atendió nadie. El empleado que nos dio las llaves nos puso en contacto con Fany, otra empleada, que se tomó bastante interés pero tenía poca capacidad de decisión. Su jefa no atendía el teléfono. Ante la imposibilidad de acceder a la vivienda, intentamos alojarnos en algún hotel, sin suerte. A las 3 de la madrugada Fany nos consiguió un piso que acababan de dejar otros inquilinos (sábanas usadas, solo una toalla, piso sin limpiar...), donde pudimos pasar lo poco que quedaba de noche.
A primera hora de la mañana nuestra puerta seguía sin poder abrirse. Entramos gracias a un vecino. Llegó Pauline, otra empleada de la agencia, y la única solución que dio fue pedirle al vecino que no cerrara la puerta por la noche porque la agencia NO TENÍA LLAVE. !!!! Increíble que se alquile un apartamento y no se comprueben las cerraduras que tiene!!!!
Exigimos la devolución del importe de esa noche y sí, nos devolvieron el dinero del alquiler, pero sin la parte proporcional de servicios y comisiones. Y aún estamos esperando alguna nota de disculpa por parte de la agencia. El daño moral, los nervios y el cansancio por pasar tu primera noche de vacaciones de esa forma, parece que no cuentan. Fany fue la única que se tomó interés y nos ayudó.
En cuanto al apartamento, es amplio, luminoso, muy silencioso y confortable, a excepción de las escaleras que llevan a los dormitorios, que son muy estrechas y hay que tener cuidado. La zona es muy tranquila y está muy cerca de la zona turística.
La cocina está bien equipada pero le hace falta una buena limpieza en los armarios. Cosa que nos costó hacer porque no había lavavajillas, estropajo, bayetas...etc.
En fin, un inicio de vacaciones difícil de olvidar.
Eso sí, Burdeos, muy bonito.
María José P.
Se alojó 6 noches en agosto de 2017
