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Llega el otoño. Y con él se inicia la temporada de maratones. No es casual. Esta es la mejor estación para correr, cuando el sol ya no abrasa pero el frío aún no hace de las suyas. Por eso tantas capitales en todo el mundo sitúan tanto en estas fechas como en primavera sus maratones. Pruebas deportivas cada vez más populares y que cada año mueven a más y más viajeros que programan sus escapadas en función de este calendario.
El BMW Berlín Maratón, el 28 de septiembre, marca el punto de partida, pues es el primero de los grandes que se celebra, pasado el verano. Y el más rápido pues discurre por una superficie muy llana, algo que los corredores valoran mucho. Después, le toca a Lisboa, el próximo 5 de octubre. Uno de los preferidos por los españoles dada la cercanía de la capital portuguesa. En esta ocasión, en Lisboa esperan a más de treinta mil atletas en ansiosos por recorrer con éxito los 42,195 kilómetros reglamentarios con salida en la bella Cascais y con la meta en el Parque de las Naciones de Lisboa, en el antiguo recinto de la Expo. Queda así definida una ruta paralela al mar a través de las ciudades de Carcavelos, Estoril, Oeiras y Belém. Sin duda, tentador.
El domingo 12 de octubre ¡Chicago!, otro de los grandes. Y el 19 de octubre le toca el turno a Amsterdam que celebra la 39ª edición del TCS Maratón. El 26 de octubre Venecia... Y ya en noviembre, el día 2, la cita más importante en el calendario. ¡El famoso maratón de Nueva York!.
Siempre se celebra, desde 1970, el primer domingo de noviembre. La primera maratón de la ciudad se corrió en 1970 y tuvo 55 finalistas. Han pasado los años y poco a poco, el maratón de Nueva York ha crecido hasta llegar a ser el más multitudinario del mundo con una participación que, según datos de la última edición, supera los 40.000 corredores. Es uno de los pocos que se retransmite en directo por televisiones de todo el planeta y que reúne a famosos varios que no quieren perder la oportunidad de participar en la prueba deportiva ¡popular! más mediática del planeta: las actrices Katie Holmes o Pamela Andreson, la cantante canadiense Alanis Morissette o españoles como la modelo Blanca Suelves, la presentadora de televisión Anne Igartiburu, Alfonso de Borbón y muchos otros anónimos como una servidora.
Para muchos, correr este gran maratón es ante todo un reto personal y deportivo. Pero también seduce a muchos no deportistas que no quieren dejar pasar la oportunidad de ver como una ciudad se vuelca, literalmente, para animar a los corredores llegados desde todos los rincones del mundo. Sin duda, lo mejor de Nueva York es el ambiente festivo que se vive ese día por las calles por donde pasan los corredores.
Desde Staten Island, de donde parte la carrera mientras suenan los acordes del mítico “New York New York” de Sinatra. Pasando por el barrio de moda en la Gran Manzana, Brooklyn, el relajante distrito de Queens donde hasta los niños paran a los corredores para estrecharles la mano. No faltan en el recorrido el Bronx y Harlem, en los que los lugareños reciben a los atletas con músicas alegres, cantos varios y coros con ¡sonidos de sirenas de bomberos, ambulancias y policía en modo bienvenida! Y por fin Manhattan a donde se accede por la Quinta Avenida hasta Central Park donde espera la siempre abarrotada línea de meta.
Pocos viajeros que se dejan caer por Nueva York conocen tantos distritos como los corredores del maratón. Lo mismo ocurre en casi todas las urbes donde se celebran estas pruebas. Los corredores atraviesan toda la ciudad, desde los barrios más famosos hasta los más periféricos. Y las metas siempre están en lugares emblemáticos como estadios olímpicos, monumentos... lo que impresiona a los participantes. “Acabar el maratón ya es de por si increíble pero la sensación de llegar a un estadio olímpico, como me ocurrió en Estocolmo, es alucinante. Oyes aplausos, ves que está lleno a rebosar. Te sientes héroe por un día, es emocionante” comenta Jesús AC. corredor nato de maratones con unos cuantos metas ya conquistadas en su pasaporte. Coincide Jesús con otros muchos aficionados que recalcan que el final es el mejor momento, lo cual comparto. Cuando uno se ve en la meta, con la sensación del reto conseguido. Y se siente la ovación de los espectadores. Un momento único que hace que compensen los duros meses de entrenamiento y el dinero invertido en el viaje.
Eso sí. Si la idea de correr un maratón te seduce, ¡ojo! Es esta una decisión que requiere planificación. No sólo en lo deportivo, pues una prueba de resistencia de estas características exige un entrenamiento previo estricto y planificado. También al parte formal. Y si vas acompañado, mejor. Las carreras siempre caen en sábado o domingo con lo que es una oportunidad perfecta para aprovechar y pasar un fin de semana en la ciudad donde se celebra la prueba. Por eso son tan habituales los corredores que viajan con sus familias
¿Te estás animando? Pues ¡manos a la obra! Esto es lo que tienes que hacer. Para participar en un maratón, lo primero es inscribirse en la prueba, a través de la web de la carrera en cuestión que nos interese. El pago de la inscripción sólo incluye la participación en la prueba y la entrega del dorsal, y el precio varía según la ciudad. Lo ideal es hacerlo con al menos cuatro, cinco meses de antelación, algo más en el caso de los más multitudinarios como son los ya mencionados de Nueva York, Chicago, Berlín, Londres, París e incluso el de Madrid.
El viaje y el alojamiento corren siempre por cuenta del participante, aunque hoy en día ya hay agencias y tour-operadores especializados en este pujante segmento deportivo llamado “turismo-maratón” desde donde se organiza todo lo necesario para participar en la competición, ya sea nacional internacional. Incluso acudir a ellas se hace in¬dispensable ante los grandes citas como la de Nueva York o la de Londres. En ambas pruebas hay un límite de participantes con lo que la única forma de asegurarse la inscripción es acudir a los tour-operadores oficiales.
Ahora, con toda la información en la mano solo toca empezar a entrenar. Y decidir cuál es la ciudad que mejor se adapta a nuestras necesidades, plazos y presupuesto. La lista es enorme, puedes consultarla en la web de AIMS ( Association of International Marathons and Distance Races).
He aquí algunas propuestas para los próximos meses: el 9 de noviembre, Atenas, el más auténtico por ser esta la ciudad donde finalizó el primer maratón de la historia, protagonizado por un soldado de nombre Filípides que justo salvó esa distancia para anunciar la victoria en la guerra contra los persas en el año 490 antes de Cristo. Un esfuerzo que le costó la vida y que fue el origen de esta prueba. Mas exótico es el de Singapur, el 7 de diciembre. Ya en 2015, el 15 de febrero puedes correr en Ciudad del Cabo (Sudáfrica); el 22 cita en Tokyo (Japón). En Marzo les toca el turno a Jerusalén, día 13, y a Roma, día 22, entre otros. El 12 de abril es el día de, Schneider Electric Paris Maratón... y así hasta completar una lista de ciudades de más de cien posibilidades.
Para los menos viajeros España ofrece también una amplia oferta de carreras. A lo largo del año se celebran muchos maratones que también atraen a cientos de corredores. Por ejemplo, el 30 de noviembre, en san Sebastián. El 7 de diciembre, Málaga. En 2015, Sevilla el 22 de febrero, el 15 de marzo, el Zurich Marato De Barcelona y el 26 de abril, el Rock ‘n’ Roll Madrid Maratón. Dicen que en la vida hay tres cosas que deben hacer: tener un hijo, plantar un árbol y escribir un libro. Yo añadiría y correr un maratón. ¿Te animas? Pues ¡a correr!
Nani Arenas
Comunicadora, contadora de historias y creadora del blog "la Viajera Empedernida". Periodista especializada en turismo con más de 16 años de experiencia en medios escritos y audiovisuales.También @travelinspirers
Experta en viajes HomeAway