Nuestra casa está situada en el tranquilo pueblo medieval de Palalda, cerca de la frontera entre Francia y España. El pueblo se remonta a la época romana y está construido sobre una colina con vistas al valle del río Tech y las laderas boscosas de robles de los Pirineos. Por la mañana y por la tarde el cielo por encima de nuestra casa está llena de golondrinas como dardos y buceo, y el único sonido que se oye son sus llamadas y el murmullo del río en el valle. Palalda, como el resto del Rosellón, tiene un fuerte carácter catalán a ella, y que son tan propensos a escuchar catalán que se habla en la calle como el francés.

Nuestra casa es una antigua casa de pueblo recientemente restaurada con todo el encanto de los viejos muros de piedra y techos con vigas de roble combinado con las comodidades modernas y el confort. Hay una gran terraza con sombra y un jardín con una magnífica vista sobre el río y las montañas. La cocina americana / comedor con sus electrodomésticos de acero inoxidable, isla de cocina central, estufa de gas y gran mesa de comedor de roble le inspire a la experimentación culinaria con todos los maravillosos ingredientes franceses locales disponibles para usted (por ejemplo: cerezas de Ceret; albaricoques de Rosellón, las anchoas de Coullioure). Un gran salón cuenta con 18 pies techos altos y paredes de piedra. El dormitorio de la planta baja es tranquilo y fresco en el calor del verano. El dormitorio de la planta principal tiene dos camas individuales y un balcón de Julieta con vistas al valle.

Nuestra casa está orientada al sur y recibe sol todo el día. El valle Tech es una de las más soleadas de toda Francia (más de 300 días de sol al año).

Palalda, con cerca de 300 residentes permanentes, es uno de sólo un puñado de pueblos medievales que quedan en el Rosellón. El acceso por el pueblo y para nuestra casa es a pie sólo como vehículos no pueden entrar en las estrechas y empinadas callejuelas y pasadizos de la aldea. En el pueblo se encuentra una cafetería, una panadería y una pequeña tienda de comestibles. Un mercado semanal se celebra en la plaza de la ciudad, por debajo de la iglesia del siglo décimo (domingos). La plaza de la ciudad es también el lugar de celebración de fiestas y conciertos organizados por la cafetería durante los meses de verano.

En la vecina ciudad de Amelie-les-Bains (a 19o C. ciudad balneario, 2 kms de distancia) se encuentran restaurantes, cafeterías, bancos y más tiendas. El spa aquí se remonta a la época romana y todavía está en funcionamiento.

Palalda está situado a los pies del macizo del Canigó, una montaña de 8.000 pies de la antigua importancia simbólica para los catalanes. La mayor parte de la vasta zona que rodea esta montaña es parque o bosque de la reserva nacional y no es poco común, mientras deambulaba en estas montañas, para ver jabalíes, águilas o Pyrénéen gamuza o para venir a través de los restos de una mina de hierro romana o el sitio de una batalla legendaria de la Resistencia francesa.

Para los amantes del aire libre, Palalda es una ubicación ideal. A pocos minutos de la villa tiene acceso a cientos de kilómetros de rutas de senderismo y ciclismo de montaña, algunos de ellos se remonta a la Edad Media, y todos ellos bien marcado y mantenido. (Alquiler de bicicletas de montaña están disponibles en las cercanías de Arles sur Tech, 5 kms de distancia). Durante el verano, la natación es muy bien en las piscinas rocosas que se encuentran a lo largo del valle del río Tech. Y por supuesto las playas del Mediterráneo están a sólo 40 minutos en coche.

Hay muchas atracciones culturales e históricas, así. El Museo de Arte Moderno de Ceret (7 kms), fundada en 1920 por Pablo Picasso y amigos es una visita obligada. Sí Ceret es una ciudad muy agradable con su plátano boulevard sombra y cafés al aire libre. Al otro lado de la frontera, en Figueres, España (una hora en coche) se encuentra el Museo Dalí (y si necesita más Dalí también se puede visitar su casa en Port Lligat, en la Costa Brava (alrededor de 2 horas en coche) o el castillo que compró por su amada esposa Gala en Púbol, cerca de Gerona (aproximadamente 1 1/2 horas en auto). El catalán ciudad pesquera francesa de Coullioure es un gran destino para una visita a su Palais Royale y curiosa iglesia junto al mar, y el almuerzo en uno de sus muchos restaurantes. Para una experiencia más urbana, la ciudad de Perpiñán (a 40 minutos en coche), una vez que la capital del Reino catalán de Mallorca, es como una versión más pequeña y más accesible de Barcelona (o usted podría ir a Barcelona, ​​a 2 horas de distancia en coche).

Aficionados a la historia pueden querer comenzar con el museo en el Centro Europeo de Prehistoria de Tautavel (1 1/2 horas en coche) y sus 450.000 años de historia y el seguimiento con un recorrido por los 17o C. fortalezas construidas por Vauban en Mont Louis y Villefranche de Conflent (Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO) (2 horas en coche).

Nuestra proximidad única de España ofrece otras posibilidades interesantes, como el desayuno y el almuerzo en Francia en España. Viajar por el valle le llevará a los pueblos de montaña españoles catalanes, y por el valle de las playas de la Costa Brava.

O puede que sólo quieren sentarse en la terraza, abrir una botella de vino Côtes de Roussillon Villages y ver el recorrido sol a través del cielo.

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